Paa no romper la costumbre, volvemos a madrugar, y esta vez mucho, ya que tenemos que ir al aeropuerto. Como el hotel cuando volvamos a Bangkok será el mismo que el que tenemos, decidimos dejar una de las maletas en el hotel y llevarnos sólo la más grande.
Una vez en el aeropuerto, buscamos la puerta de embarque dirección Koh Samui. Y no, no es un avión... es una avioneta de hélices! Además, el tiempo no acompañada nada.
A pesar de ello, el vuelo se hace corto y fácil. Eso sí, nos dan de desayunar la comida más mala que me han dado nunca en un avión.
Llegamos a la isla de Koh Samui y cogemos uno de los "taxis" que hay en el aeropuerto. Son coches de lujo, con precio fijo.
El hotel que tenemos reservado no se parece en nada a la descripción. Fue el único punto negativo del viaje. La habitación está genial, muy amplia y a pie de playa... una playa que durante el día no existía porque bajaba tanto la marea que el agua estaba a cientos de metros. Además, para llegar a la habitación había que bajar por unas escaleras de piedra bastante peligrosas. Pero bueno, esto no nos va a amargar el viaje, así que para compensarlo y poder tener libertad, decidimos alquilarnos unas motos.
Para comer nos dirigimos hacia Lamai, la segunda playa más grande de la isla.
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Pad Thai |
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Alitas con ajo |
Y para seguir investigando los alrededores, nos vamos hacia Chaweng, la playa y pueblo más grandes de la isla. Coger las motos se hace divertido, primero porque ambos llevábamos muchos años sin conducir una y aunque es algo que no se olvida, sí se pierde práctica. Y segundo porque se conduce por la izquierda!
Pasamos la tarde en Chaweng, nos damos un masaje de pies (este es diferente al de Khao San, porque usan un palo con el que te prietan en ciertos puntos de la planta del pie), muy recomendable. Encontramos una calle llena de puestos donde comprar cosillas y otra zona con puestos de comida, sobre todo pescado y marsico, donde eliges lo que quieres y te lo preparan. Así que decidimos cenar ahí por la noche. Antes volvimos al hotel a darnos un baño en la piscina y cambiarnos de ropa.
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Pad Thai |
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Gambas |
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Pescado frito con ajo |
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Ensalada de papaya |
Y vuelta al hotel a dormir que el madrugón había sido importante.
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